2020: Año de aprendizaje y éxitos para Mari Boya

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● Mari Boya dio el salto en 2020 a la Formula 4. Su trabajo y constancia le permitieron adaptarse a la categoría con solvencia.

● 3 victorias y 14 podios le permitieron sellar el subcampeonato ante una parrilla muy competitiva.

● Finalizó el año con sus primeros kilómetros al volante del Formula Regional, donde espera competir en 2021.

2020 ha sido uno de los mejores años en la carrera deportiva de Mari Boya. El joven talento español, a lo largo del año pasado, dio el salto del karting a los monoplazas, logró sus primeras victorias en Formula 4, luchó por el título y probó por primera vez un Formula 3 Regional. El 2020 del piloto de Les ha estado marcado por el aprendizaje, la adaptación y los buenos resultados fruto del esfuerzo. 

Boya ya está consolidado como una de las mayores jóvenes promesas del automovilismo español, pero ¿cómo ha logrado esa reputación? A continuación, se ofrece un repaso a lo que dio de sí la temporada 2020 para Mari Boya, con todas las claves de su progresión y su crecimiento como piloto.

Su actividad competitiva comenzó en febrero. Boya participó en la IAME Winter Cup, su última carrera como piloto de karting. El catalán venía de ser cuarto en el Campeonato de España de Karting y ya tenía los monoplazas como su prioridad para el año. Sin embargo, se despidió del mundo de los karts con la disputa de esta cita, en la que estuvieron algunos de los mayores talentos nacionales e internacionales, en el Kartódromo Internacional Lucas Guerrero, en Chiva.

Abril fue el mes en el que la temporada de Formula 4 Española debió haber empezado, pero la pandemia estalló. El mundo se paralizó y Boya, como todos los pilotos, tuvo que esperar. El periodo de confinamiento le impidió seguir preparándose y anunciar sus planes, pero Boya mantuvo el hábito de entrenar, tanto a nivel físico como en el simulador.

Pasaron los meses y la incertidumbre en torno a la disputa de la temporada era total, hasta que el día 1 de junio, la Real Federación Española de Automovilismo (RFEdA) anunció el nuevo calendario. La temporada arrancaría finalmente el 18 de julio en el Circuito de Navarra. Un mes antes del inicio del campeonato, Mari confirmó su participación en el mismo de la mano del equipo MP Motorsport.

La escuadra holandesa era sin lugar a duda una opción ganadora, pues habían estado presentes en la categoría desde sus inicios, realizando siempre un buen papel. Boya, además, ya conocía al equipo tras haber realizado varias sesiones de test con ellos, incluyendo una la misma semana del anuncio.

Llegó julio, la hora de la verdad, el momento de ver dónde se encontraba Boya con respecto a sus rivales. La primera carrera en Navarra despejó toda duda: Boya fue segundo tras salir cuarto. Podio en su debut con el F4, las buenas sensaciones se confirmaban. El fin de semana acabó con un cuarto puesto en la última carrera y mucho aprendizaje de cara a la temporada que acababa de empezar.

Lejos de ser un espejismo, las sensaciones y los resultados no hicieron sino mejorar a lo largo de las rondas. En Paul Ricard pudo acabar las tres carreras en el podio, además de lograr su primera Pole, por lo que se iban cumpliendo las buenas expectativas puestas en él.

La confirmación definitiva llegó en Jerez. Allí, Boya tuvo uno sus mejores momentos de la temporada al llevarse la victoria en la primera carrera del fin de semana. El fin de semana en el trazado andaluz le permitió hacerse con la segunda plaza en la general, un puesto que no dejaría hasta el final de la temporada.

La temporada avanzaba y todas las rondas vieron a Boya al menos una vez en el podio. Aragón fue su mejor fin de semana. Allí logró dos poles y dos victorias, además de subirse al podio en las tres carreras. En Barcelona puso fin a la temporada con un nuevo triple podio para despedirse de la categoría con un buen sabor de boca.

El trabajo había dado sus frutos. Boya llegaba a la Formula 4 con el objetivo principal de aprender, ser constante y crecer como piloto. En uno de los saltos más grandes en la trayectoria de un piloto -el del karting a los monoplazas-, su capacidad de adaptación se pudo ver una vez más y le permitió lograr buenos resultados, que fueron mejorando a lo largo del año. 2020 permitió a Boya convertirse en un piloto más maduro y completo. Su esfuerzo, finalmente, se vio traducido en buenos resultados.

El último mes del año permitió a Mari empezar su preparación para la temporada 2021. El piloto español realizó sus primeros test al volante de un Formula 3 Regional. En primer lugar, fue invitado por Renault Sport al ‘rookie test’ de la Formula Renault, celebrado en Paul Ricard. Allí, Boya tuvo la oportunidad de rodar con el equipo R-Ace GP.

Sin embargo, la escuadra francesa no es el único equipo con el que Boya ha probado el Regional. A lo largo de una activa semana de test en Motorland Aragón y el Circuit de Barcelona-Catalunya, el joven talento rodó con los equipos MP Motorsport, M2 Competition y Arden Motorsport; todas formaciones con experiencia y éxitos en la categoría. Fue, en definitiva, un mes muy productivo y en el que pudo empezar a conocer el Formula Regional. 

En definitiva, 2020 ha sido un año de crecimiento y aprendizaje, en el que Mari Boya ha logrado consolidarse como uno de los pilotos más prometedores en el automovilismo español. El español está preparado para 2021 y para los nuevos retos que afrontará en esta nueva fase de su carrera deportiva.

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